COLIMA

CAMPUS MANZANILLO, INVESTIGAN ALUMNOS DE LA UDEC MAMÍFEROS MARINOS EN COSTAS DE COLIMA Y JALISCO

*Como parte de sus prácticas de campo, estudiantes de la licenciatura en Oceanografía de la Facultad de Ciencias Marinas investigan algunos comportamientos, enfermedades y hábitat de las ballenas jorobadas y del delfín moteado, entre otros temas.

Parte del proceso formativo de los estudiantes de la Universidad de Colima se encuentra en las prácticas de campo que se realizan en las diferentes carreras que ofrece nuestra Casa de Estudios, las cuales contribuyen de manera integral a su profesionalización.

Ejemplo de lo anterior son las prácticas que realizan estudiantes de Oceanología de la Facultad de Ciencias Marinas (Facimar). Sobre dichas actividades, el profesor Christian Daniel Ortega Ortiz, junto con cinco alumnos, habló de sus experiencias.

Daniel Ortega comentó que estas prácticas responden a una multitud de proyectos relacionados con mamíferos marinos, que se han desarrollado en las costas de Colima y Jalisco a través de viajes realizados de 2010 a 2016, una vez por mes, así como una expedición hace dos años a la Isla Socorro: “El proyecto finalizó por un tiempo y hace unas semanas se tuvo la oportunidad de realizar otra visita a la Isla Socorro”.

Mencionó, además, que la mayoría de los proyectos son estudiantiles y se ha procurado que cada año se forme un grupo de trabajo compuesto por jóvenes de distintos semestres, a fin de recolectar datos para sus proyectos individuales y para los de sus demás compañeros, participando así de manera integral.

Respecto a la participación de los estudiantes, Miriam Llamas, estudiante del sexto semestre, comentó que el objetivo de su proyecto es analizar la estructura de los cantos de las ballenas en dos ambientes: uno donde hay ruido marino y otro donde no lo hay.

Dijo que dicha investigación se realiza por medio de hidrófonos, del trabajo de campo y en gabinete, donde revisa la estructura de la canción y compara las diferencias de manera temporal y espacial.

Recalcó que actualmente se encuentra en el periodo de recabar datos; sin embargo, “he aprendido mucho. Desde que comencé mi formación me interesó esta rama de la Biología. Aprendes mucho de este tipo de animales al trabajar con ellos y observarlos de manera vivencial; no lo cambiaría por nada”.

Por su parte, Jessica González, quien suma casi cuatro años trabajando junto al doctor Christian Daniel Ortega, compartió algunos aspectos de su trabajo, el cual se relaciona con la ecología espacial del delfín moteado.

Informó que se utiliza la foto-identificación para individualizar a cada uno de los delfines y ver si permanecen en una determinada área o se mueven, lo que tiene una gran importancia ecológica sobre una zona que hay que preservar: “A nivel personal es muy enriquecedor, pues ciertamente los que trabajan este tipo de proyectos conocen aspectos del mar de manera visual y perciben otra forma de aprender que finalmente ayuda a adquirir conocimientos más que en el aula”.

En su turno, la estudiante del cuarto semestre, Andrea Cuevas dijo que actualmente trabaja con un tema relativo a la ballena jorobada y su análisis espacial, el cual se realiza mediante la foto-identificación de las aletas que, de manera similar a las huellas digitales, permiten hacer comparaciones entre ellas y encontrar las características individuales.

Sobre estas actividades, dijo que no existe un momento difícil en particular, pues todos los días se prende algo nuevo y hay la oportunidad de ver escenarios impresionantes: “Es algo increíble, pues se pueden apreciar organismos que cerca de la costa no hay; es sumamente agradable”.

De igual manera, Andrea Ramírez Castillo comentó que se enfoca en un proyecto específico sobre las enfermedades cutáneas de los mamíferos, “esto con el objetivo de encontrar las diferencias entre estas ballenas cercanas a la bahía y de la Isla Socorro, e inferir si la contaminación afecta a estos animales”.

David Martínez Sánchez, por su parte, estudiante de sexto semestre, dijo que su proyecto es muy diferente al de sus demás compañeros, pues trabaja con animales muertos: los varamientos del delfín moteado o algún otro organismo en las costas de Colima y parte de Jalisco.

Dijo que trabajan en colaboración con la Secretaría de Marina atendiendo esos varamientos: “El traslado será posible si se cuenta con un terreno para la sepultura del espécimen y la realización de estudios osteológicos de craneometría, estimación del sexo, el estado de madurez que tiene el organismo y si es un depredador activo”.

Para finalizar, los participantes coincidieron en que dichas prácticas constituyen una experiencia invaluable y una gran aportación a su desarrollo profesional.