OPINION

TONALTEPETL – 23 DE DICIEMBRE 2021

Gustavo L. Solórzano

Indudablemente la espiritualidad y la nostalgia se fusionan para hacer de la navidad la época mas hermosa del año, un año más, un año menos. Los que se fueron y los que seguimos aquí en espera de nuestro tiempo. Muchos de nosotros somos parte de una generación que se está yendo para nunca más regresar, es difícil disociar el pasado del presente. Los de mi edad vivimos grandes e inolvidables momento, nos queríamos todos, y todos nos cuidábamos. Solo tres miedos significaban nuestra vida, los “borrachos” dicho sea con todo respeto, los marihuanos y los fantasmas. Mención aparte merecen los cuerazos que nuestra madre nos daba, por supuesto.

Es larga la lista de gente que ya no está y cuya huella de familiaridad y amistad sigue viva en mi pensamiento. Para ellos y para los de usted que amablemente me lee, elevo mi rezo para que la luz siga siendo su guía.

La natividad de Jesús esta ligada a la de otros 24 seres, por lo menos, que son celebrados desde diferentes corrientes filosófico religiosas. En el caso de nuestra cultura es Huitzilopochtli, o “Colibrí Zurdo” es el dios de la guerra, advocación solar y patrono de los mexicas. … Era hijo de Coatlicue, hermano de Coyolxauhqui, la Luna, y de las estrellas, los Centzonhuitznahua, todos ellos dioses de inspiración mexica. Finalmente, nuestra verdadera fiesta antes del genocidio cometido por los españoles.

A más de dos mil años de su presencia, haya existido o no, Jesús el nazareno representa al amor y al perdón, dos expresiones únicas para quien se digne de ser un buen humano. Tiempo pues, de introspección, reconciliación y reencuentro, de sanación interior y de empezar de un borrón y cuenta nueva. De todo corazón deseo que el cristo renazca en su ser y       que, con ello, marque un nuevo rumbo en la unificación y la gratitud interiores. Si quiere tener una navidad feliz, deje de ver noticias periodísticas y televisivas, le aseguro que el mundo no se termina y su paciencia y tranquilidad sí.

Aberrante e inaudito, que una institución tan representativa vaya en contra de la vida, leí a Ángel Durán y no me sorprende, me indigna que las autoridades del Tecnológico de Monterrey talen arboles una y otra vez, peor aún, que ninguna autoridad los detenga o sancione. Así han sido ellos, parece que poco o nada les preocupa y jamás se ciñen a la autoridad local, porque argumentan que ellos solo obedecen a sus mandos superiores. Lamentable su falta de respeto en todos los ámbitos, mayormente cuando sus decisiones van en detrimento de la vida y la salud, ¿Qué enseñarán en sus clases de bioética, civismo y ecología? Si es que las tienen. Por lo pronto esta institución queda reprobada y sin derecho a examen de regularización. Ojalá que la autoridad correspondiente aplique una sanción acorde a la falta reiterada, según señala Ángel Durán.

Me sumo al respetuoso llamado que hace Ángel Durán a las autoridades responsables, para que detengan esta barbarie educativa que afecta severamente a nuestro ecosistema. Por favor detengan la tala que está haciendo el Tecnológico de Monterrey y que realice una campaña de reforestación.

ABUELITAS:

Seguramente por desconocimiento, algunos servidores públicos de la nueva administración están incurriendo en actitudes desfavorables hacia algunos sectores poblacionales. Manchando con ello, la política de acercamiento y buen servicio que nuestra gobernadora pondera. Ningún servidor publico debe servirse del cargo y menos tratar de mala manera a sus subordinados o a los usuarios que acuden a ellos. Toda responsabilidad es para servir, no para servirse, las canonjías y los compadrazgos se terminaron. Ojalá que les quede claro y modifiquen para bien, su actitud servilista e impositiva. Es cuánto.