380 ANIVERSARIO DE LA RENOVACIÓN MILAGROSA DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE TALPA
Sería la media mañana, entre diez y once aproximadamente, de aquel venturoso viernes 19 de septiembre del año de 1644, cuando llegó la joven María tenanchi al altar de aquella humilde capilla de adobe, luego tomó primero entre sus manos una imagen del Señor crucificado que también debía de sepultar, la envolvió con cuidado y veneración; tendió enseguida el brazo para tomar a la virgencita del Rosario, pero en ese momento en que María trataba de tocar la imagen vieja y apolillada, esta se revistió de una luz vivísima y de un resplandor tan intenso y deslumbrante que semejaba un relámpago; en ese mismo instante la escultura de la sagrada imagen se vistió de un poder y de una majestad sobrehumanos cual si hubiese sido tocada por el poder Divino. Todo esto causó una impresión tan fuerte a la vidente María que cayó al suelo desmayada; las demás naturales la fueron alzar y le preguntaron que había pasado, ella les contestó: ¿no veis esa virgen desbaratada que esta de esta manera echando resplandores de fuego y rodeada de nubes que hizo así?¿Qué será esto?
Con una sencillez evangélica nos ha conservado LA AUTENTICA toda la grandeza de aquella escena memorable del gran portento de la Renovación milagrosa.
Gracias padre Eterno por el gran regalo de esta bendita imagen, gracias madre santísima por quedarte con nosotros en este pueblo.
BENDITA SEA NUESTRA SEÑORA…
Hermanos los invitamos a ofrecerle una salve a nuestra señora en este su día para honrarla y alabarla en su aniversario.