EDUCACION: PARA MADURAR MENTALMENTE, VERDADERO OBJETIVO
“La capacidad crítica y de análisis, así como la educación científica, han sufrido una transformación extraordinaria con tal de que los estudiantes aprueben a toda costa”: Alfredo Aranda, investigador.
Una investigadora y tres investigadores de matemáticas y física de la Universidad de Colima analizaron hace unos días “Los mitos de la educación”, durante el programa de divulgación científica “El ruido cuántico de la radio”, que se transmite por Facebook en vivo y en YouTube.
En ese programa, Ricardo Sáenz, César Terrero, Alfredo Aranda y Elena Tejeda coincidieron en que existen muchos mitos en torno a la educación en general, sobre todo la universitaria; “nos dicen que todos deberíamos tener carrera universitaria, pero otros piensan que ésta no es importante para hablar de ciertos temas; lo cierto es que todos creen que la obtención de un grado habilita automáticamente, y no es así”, dijo Elena Tejeda.
Alfredo Aranda comentó que “las universidades deben estar conscientes sobre lo que ofrecen, bajo qué modelo, lo que esto significa, a quién educa, cómo y por qué, ya que se debe analizar la masificación de la educación y sus repercusiones en el mundo”.
Este profesor-investigador agregó que “la capacidad crítica y de análisis, así como la educación científica, han sufrido una transformación extraordinaria con tal de que los estudiantes aprueben a toda costa, lo que ha generado personas que reciben un título y un certificado, pero que no tienen la capacidad de generar conocimientos”.
En su turno, Ricardo Sáenz comentó que uno de esos mitos es que un título mejora la vida; “no es clara esa relación y esto ha generado la esperanza de que un título lo da todo. La educación universitaria debería ser para madurar mentalmente y no para dar un trabajo”.
En este mismo sentido, César Terrero dijo que dicha situación ha generado que cada vez la educación sea más mediocre; “como se ha vuelto masiva, vemos estudiantes sin vocación real de estudio. La masificación de la educación, hecha de manera obligada y apresurada, ha generado aspectos negativos. Se ofrecen títulos por conocimientos que la gente no tiene”. Esta situación, aclaró, se da en muchos los países, no es privativa de México o Colima.
Finalmente, concluyeron que el sistema educativo básico no debería basarse tanto en calificaciones y contenido, sino en mostrar la pasión por el aprendizaje de conocimientos y una visión de ellos mismos a futuro, además de sensibilizar a los servidores públicos para que ayuden a su país e inviertan más en educación de calidad.
