EL PODER JUDICIAL UN RETO DE TRANSFORMACIÓN PARA LA NUEVA ADMINISTRACIÓN – I PARTE
El poder judicial del Estado tiene que transformarse en dos vertientes importantes; la primera cambiar su estructura desde el punto de vista jurídico y aquí debe de intervenir el Congreso del Estado y de forma administrativa la que le corresponde al pleno del poder judicial, creando una nueva forma de llevar a cabo el procedimiento judicial de cada juicio, cumpliendo con todos los requisitos legales y que respeten los derechos humanos en juego y; la segunda vertiente en; un cambio de pensamiento humanista de todos sus integrantes, desde la participación y trabajo de los actuarios, secretarios, jueces y magistrados; solamente así tendremos un poder judicial fuerte con una base firme, que, a corto plazo, se irá transformando en un sistema judicial local confiable.
El derecho más importante que debe de cuidar el poder judicial para que una sociedad le tenga confianza, es garantizar el derecho de acceso de justicia establecido en el artículo 17 de la Constitución y el artículo 8 de la Constitución colimense; éste es un derecho a la igualdad que debe tener toda la persona, que, cuando sea necesario acudir a resolver un conflicto haya un sistema de justicia eficiente que los resuelva conforme a lo que establece la constitución y las leyes; hoy por hoy, Las leyes necesitan reestructurarse por el poder legislativo para que sean coincidentes con el nuevo modelo de justicia constitucional que establece exclusivamente la protección a los derechos humanos.
Sin embargo, no es suficiente que se cambie la ley conforme a este nuevo modelo, sino que una vez cambiado todo el marco jurídico, se necesita que, quienes la aplican, tengan un pensamiento progresista, liberal y apegarse a los principios y valores que rigen en nuestra Constitución nacional desde 2011.
El problema principal por el que no está funcionando el sistema judicial en Colima, es porque tenemos un sistema legalista que no obedece a los parámetros modernos del sistema de justicia nacional, pues se aplica la ley a rajatabla, sin observar que ya tenemos otro sistema judicial en México y que es, la protección de los derechos humanos de manera progresista y seguimos utilizando el legalismo, que por cierto éste tiene cuando menos tres décadas que ha dado muchos problemas.
Ahora necesitamos congresistas humanistas, que sepan identificar los derechos humanos y que con base en ellos, qué por cierto, se encuentran en la Constitución y en tratados internacionales, y con base en estos modificar toda la legislación, todo el marco jurídico del poder judicial y por supuesto, debemos de tener integrantes del sistema de justicia que lo sepan aplicar e interpretar y eso nos dará la eficacia en la solución de conflictos ante los tribunales.