EN MANZANILLO PASEO LAS BRISAS, MÁS DE UN KILÓMETRO DE DIVERSIÓN
*Quienes ofertan sus servicios en la zona, emprendedores locales, cuentan con todas las medidas de sanidad exigidas por las autoridades
*La Asociación de Comerciantes trabaja en coordinación con las autoridades estatales y municipales en el embellecimiento de las calles del puerto colimense
*Se esperan beneficios para la zona y comerciantes con la próxima administración estatal que encabezará Indira Vizcaíno
Paseo Las Brisas, en Manzanillo, es una zona comercial conformada por emprendedores locales, que ofrecen a quienes lo visita un área para disfrutar de artesanías, alimentos y entretenimiento cumpliendo con todas las medidas sanitarias implementadas por las autoridades estatales.
Así lo dio a conocer Jorge Padilla Castillo, presidente de la Asociación de Comerciantes del Paseo Las Brisas, asociación civil fundada el 8 de noviembre de 2014 para cuidar los intereses de los comerciantes de la zona.
Un espacio de 1.5 kilómetros en los que se puede encontrar bares, restaurantes, hoteles, tiendas de abarrotes, comercio cultural y entretenimiento ciento por ciento familiar que sin lugar a duda es un sitio imperdible para quienes visitan Manzanillo.
RELACIÓN CON EL MUNICIPIO
Respecto a la recién creada Comisión de Imagen Urbana de la Av. Lázaro Cárdenas-Las Brisas, Padilla Carrillo dijo que es un paso de madurez cívica y política, “gracias a la Asociación se tiene comunicación con autoridades gubernamentales, en este caso municipales”, y es que en seis años que tiene conformada Paseo Las Brisas el crecimiento comercial ha sido considerable, es decir la cantidad de restaurantes y bares en la zona ha registrado un incremento y con ello el reto de convivencia urbana como es el uso de las banquetas ya que “existía un “convenio” no escrito en el que los locatarios podían colocar las sillas y mesas sobre las mismas, sin embargo, cada locatario hacia uso a su conveniencia lo que ocasionaba molestias entre los vecinos del lugar”.
Por lo anterior y luego de varias reuniones celebradas en el año 2020, entre las partes involucradas, se llegó a un acuerdo que terminó con la generación de un reglamento de imagen urbana que se trabajó entre; ayuntamiento, vecinos y comerciantes del lugar y con el que se dio orden a la calle pues la intención tanto de la autoridad de Manzanillo como de la Asociación es que la zona siga creciendo comercialmente pero con orden ya especificado y acordado entre lo que destaca el uso de la banqueta en un 50 por ciento, asimismo el tipo de letreros de imagen urbana que se pueden utilizar.
Para el líder de los comerciantes de Paseo Las Brisas esta Comisión será el espacio en el que los podrán llevar las propuestas de mejoras y que se puedan realizar de manera conjunta con vecinos y autoridades del municipio.
El corredor en el que se ubica Paseo Las Brisas comprende 2.5 kilómetros; de los cuales 1.5 kilómetros es la zona más poblada; en donde se cuenta con bares, restaurantes y entre 10 y 12 hoteles de los cuales cuatro son parte de la Asociación, además de guardería, tiendas de abarrotes, lo que hace que quien visita esta zona de Manzanillo como turista puede resolver sus necesidades de consumo sin alejarse del área.
“Un ejemplo es el turismo canadiense que cada año, durante seis meses vive en Manzanillo y que por más de dos décadas no tenía donde satisfacer sus necesidades de consumo y que con el crecimiento de este corredor fueron los más agradecidos”, recuerda Jorge Padilla.
El reto actual es el tema del estacionamiento pues aunque todavía no es una zona saturada se debe hacer un llamado constante a los clientes para que no hagan uso de áreas prohibidas para parquearse como son cocheras; por lo que se trabaja de manera frecuente con autoridades de vialidad para advertir a los clientes sobre los sitios indebidos, así como los costos que tienen las multas por no hacer caso del reglamento vial.
Respecto al tema de la basura, Padilla Castillo refirió que se ha considerado la posibilidad de adquirir un camión para la recolección de los deshechos; sin embargo se ha tenido una buena comunicación con las autoridades municipales para fijar horario de recolección y evitar que la basura permanezca en la calle o genere mala imagen del lugar, por lo que este es un tema resuelto.
Otro de los temas a resolver es el espacio que utilizan quienes pasean en bicicletas ya que es necesario que aprendan a convivir con los peatones.
IMAGEN URBANA
Jorge Padilla informó que la Asociación que él encabeza trabajara eventualmente con el Instituto de Planeación para el Desarrollo Sustentable de Manzanillo (Inplan) para mejorar la zona de Las Brisas así como dar su opinión sobre lo que a su consideración, le hace falta al municipio como un acceso carretero digno ya que en la actualidad quien llega de Colima se encuentra con una zona muy dañada.
“Asimismo es necesario embellecer las calles, pues hay que recordar que Manzanillo tiene una vocación comercial en el puerto, pero no hay que olvidar que el sector turístico es importante para la economía local y estatal, por lo que es necesario embellecer lo suficiente para que el turista disfrute más de la ciudad”, señala Padilla Carrillo.
NUEVA ADMINISTRACIÓN ESTATAL
Sobre la llegada de Indira Vizcaíno Silva a la administración estatal, recordó que la Asociación de Comerciantes del Paseo de Las Brisas, ha tenido acercamientos favorables con ella y su equipo, en donde se les han planteado, desde hace al menos tres años, temas como el de la creación de ciclo-vías, la creación de un parque vertical, entre otros proyectos que se tiene la confianza de que se puedan concretar ya que, Indira, es una persona que conoce la zona y las necesidades de quienes en ella conviven.
INVERSIÓN
Al hablar de la inversión que realizan los comerciantes, recordó que “en cada evento que se lleva a cabo y en los que la Asociación forma parte los agremiados realizan una aportación que en los primeros años fue entre los 400 mil pesos y los 600 mil pesos, para realizar diversos eventos ya sea culturales o turísticos con lo que se solventan gastos de las pistas, del escenario, del sonido, de la muestra gastronómica, de la decoración, entre otras cosas”; es necesario aclarar que antes de la pandemia la aportación era cercana al millón de pesos.
CORREDOR GASTRONÓMICO, CULTURAL Y TURÍSTICO EN COLIMA
Padilla Castillo señaló que actualmente se encuentran a la espera de que el semáforo epidemiológico permita el volver a instalar el mercado alternativo que cada viernes ofrece un espacio cultural y de comercio donde se exhibe y venden artesanía local.
Los miembros que conforman la Asociación han participado en coordinación con autoridades municipales y estatales en muestras gastronómicas, festivales de cine, con la secretaría de cultura; también en el programa denominado Manzanillo Vive donde dan la bienvenida a turistas extranjeros que visitan el municipio, así como de otros estados de la República, esto en coordinación con la secretaría de turismo y el fideicomiso de turismo.
Asimismo en eventos de competencia como el de altares de muerto en el que se trabaja con universidades de Manzanillo, autoridades municipales de cultura y turismo, además colaboraciones en eventos deportivos con instancias estatales y privadas.
MI BARRIO CON ENCANTO
Sobre el programa “Mi barrio con encanto” el líder de los comerciantes de Paseo Las Brisas, dijo que “es un proyecto propuesto por la secretaría de turismo hace algunos años y que al igual que el programa Pueblos Mágicos aún no termina de asentarse” por lo que hasta el momento la Asociación continua instalándose por las calles con la denominación Paseo de Las Brisas con el principal objetivo de crear una comunión entre los comerciantes participantes y los vecinos de la zona es decir que exista armonía entre colonos, comerciantes y clientes.
TURISMO EXTRANJERO
Respecto a la presencia de canadienses en Manzanillo, mencionó que debido a la pandemia está se ha visto disminuida en los últimos dos años, aproximadamente, sin embargo se espera que los controles sanitarios implementados por las autoridades permitan que el turismo proveniente de Canadá vuelva a pasar su temporada “habitual” de seis meses; de noviembre a abril que son los seis meses más fríos en aquel país, en el puerto colimense.