ENTREGARON RECONOCIMIENTO POR SU ALTRUISMO A LA LICENCIADA CATALINA SAUCEDO DEL TORO VIUDA DE ISIDORO MORALES
Se llevó a cabo la celebración del Día de Muertos en el jardín de Niños Isidoro Morales Fernández, donde instalaron un altar en honor al personaje que lleva por nombre este plantel escolar, quien hace tres años dejó de existir.
En el evento estuvo como invitada de honor Catalina Saucedo del Toro viuda de Isidoro Morales Fernández y la comunidad en general.
El Día de Muertos es una celebración a la memoria y un ritual que privilegia el recuerdo sobre el olvido, siendo esta una de las más grandes festividades de nuestro país, motivo por el cual los niños del plantel trabajaron, aprendieron, compartieron sobre esta hermosa tradición y costumbre.
Una de las maestras de la institución educativa dio a conocer la semblanza del licenciado Isidoro Morales, quien dijo que fue una persona íntegra, ilustre e inolvidable, “existen algunos seres que cuando pisan la faz de la Tierra y toda su vida en este plano la condujeron de manera productiva, próspera, fructífera y dejan una huella sólida por toda la eternidad en nuestro entorno, se constituyen bajo un recuerdo que perdurará permanentemente imborrable”.
Tal fue el caso que de una feliz pareja colimense formada por Dionisio Morales Cabellos y Adelina Fernández Sánchez, nació un 23 de marzo de 1934 en el cálido pueblo de Tepames un radiante y y sano niño que llevó por nombre Isidoro Morales Fernández; a los 13 años fue invitado por su tío, rector de la Universidad de San Nicolás de Hidalgo, don Guillermo Morales, a continuar sus estudios en la ciudad de Morelia, Michoacán, convirtiéndose al obtener en la referida universidad su título de licenciado en Derecho con mención honorífica siendo el único colimense nicolaita, egresado en ese entonces de tan reconocida nacionalmente y prestigiada universidad michoacana.
En su vida se mantuvo entre dos circunferencias latentes, la primera su sólida convicción or el servicio plasmado en su total entrega al trabajo al ser útil al prójimo, al respeto total de la humanidad; la segunda su enorme amor a la vida, a sus semejantes, a la ternura y la sensibilidad especial hacia el ser hacia su eterna y transmitente jovialidad purificante y cosmética.
Isidoro único original, ilustrado, sagaz, apuesto y de elegante caminar, siempre se distinguió por su singularidad de poseer vehículos de gran clase, permaneció y convivió en varios grupos de diversa índole social, en los cuales disfrutó de un trato especial en su incursión, siendo algunos de estos el de los jubilados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el de los jubilados y sindicalizados de la Fetse, el de los del Colegio de Notarios, el de Amigos de Morelia, los de la logia, los de Tepames, Colima, el de Capufe y el de sus amigos de la banca, ser excepcional en la proclividad de su amistad y del altruismo.
Terminó en este ciclo de vida, el destino nos separó a muchos, un hecho sumamente doloroso y sorpresivo el 21 de julio del 2015, ya hace 3 años quedó registrado en nuestra historia con el gran pesar de traslado dentro de este plano de un hombre ilustre, íntegro e inolvidable.
La directora del kínder, Ofelia Velasco García, al hacer uso de la voz, dijo que junto con la mesa directiva y la licenciada Katy se logró tener los primeros juegos para los niños, siendo la licenciada Katy la madrina principal de todos estos proyectos, motivo por el cual entregaron un reconocimiento por el altruismo que ha demostrado a toda la comunidad educativa del preescolar Isidoro Morales Fernández, el cual impacta significativamente en el desarrollo integral de los alumnos, su compromiso con la comunidad es ejemplar.
Los asistentes disfrutaron de coloridos bailables, cantos y calaveritas que desarrollaron los pequeños de este preescolar ubicado en Villa de Álvarez.
