ESTE SÁBADO 27 DE AGOSTO, LA CEREMONIA DEL VENADO AZUL
Este sábado 27 de agosto, se llevará a cabo la ceremonia ancestral “Hikuri” en la playas de El Real por lo que invitan a las personas a participar de esta experiencia, comentó una de las organizadoras, como es Judith Torres, ya que con su presencia y aportación, lo recaudado será para las comunidades Wirraricas, donde es utilizado para llevar víveres y sustento a sus familias.
En este evento “sanas tú y sanamos todos” y “con la valiosa ayuda, estarás aportando para el bienestar de estas familias, que te sea multiplicado y deseamos contar con su presencia”. Mencionó que “si tienes alguna cobija, cobertor, tenis, ropa o inclusive suéteres o abrigos, en buen estado, que ya solo están ocupando espacios en tu hogar o porque ya tienes tiempo que no te los pones, son aceptados como donación.
Estarán reuniendo estos días algunos recursos que les puedan ser de utilidad para sus familias”. Dio a conocer que estará recibiéndolos “en mi club de nutrición de Herbalife en Camino Real de la colonia El Porvenir, o los pueden llevar el día de la ceremonia, limpios y en bolsas de plástico por favor”.
Esta ocasión, la ceremonia tendrá costo de 1,200 y que el llamado del hermoso venadito azul, llegue a su corazón con bondad y desapego. ¿QUÉ ES HIKURI? El Hikuri sirve como medicina para que la persona adquiera conciencia de sus problemas en su verdadera significación, a partir de las ceremonias se puede concebir también, la curación física de algunas enfermedades; da salud y bienestar, vitalidad y energía.
La descripción de algunos de los estados de conexión, místicos y espirituales, provocados por la Hikuri y el espíritu del venado: Introspección y regresión: Una persona por lo primero que pasa es por un proceso de reflexión sobre su propio ser, el cual se considera el examen del alma por sí mismo (autocontemplación, reconocimiento de la evolución de nuestro ser). Regresión. En la ceremonia, una persona puede recordar fases pasadas de la vida, para solucionar conflictos, lo cual permite conectarse y reconocerse mejor. Se diluyen así las tensiones o conflictos en nuestro ser y se produce una reestructuración y cura de la personalidad.