¿EXISTIÓ REALMENTE JESÚS DE NAZARET? – ANÁLISIS POLÍTICO
Por Abel González Sánchez
La Navidad y Semana Santa son momentos especiales de acercamiento familiar y social, son tiempos de reflexión hacia tu persona y de una mayor convivencia con nuestros padres y hermanos, pero además con nuestra religión, aunque las enseñanzas de los sacerdotes y datos de la Biblia siguen generando muchas preguntas sin respuestas poco precisas, por ejemplo; ¿Jesús nació en Belén o Nazaret?, debido a que Mateo y Lucas nos dicen que Jesús nació en Belén, mientras que los otros dos evangelistas, Marcos y Juan, consideran que su venida al mundo ocurrió en Nazaret.
Sin duda la figura de Jesucristo o Jesús de Nazaret sigue presentando misterios sin respuesta, la vida del personaje del mesías cristiano se entremezclan en una especie de torbellino que dificulta enormemente saber qué detalles ocurrieron y cuáles fueron creados como parábola o para construir la figura religiosa que sigue aumentando y ha llegado a nuestros días.
La Navidad gira en torno a la idea de celebrar el nacimiento de Jesús de Nazaret enviado de Dios, como símbolo de esperanza y alegría para la humanidad, aunque algunos historiadores religiosos también dudando de la fecha exacta del nacimiento de Jesús, asegurando que el nacimiento del niño no ocurrió el día 24 sino el 25 de diciembre.
Sin embargo para más de 2,500 millones de personas, cerca del 33% de la raza humana que profesamos el cristianismo consideramos que la mejor interpretación de la Biblia se basa en la fe a Dios, a Jesús, este tema es una cuestión de fe. Mucho más de la tercera parte de la humanidad no necesita pruebas de que hace 2.000 años caminó sobre la Tierra un hombre llamado Yeshua, Jesús de Nazaret en la tierra prometida, en Jerusalén, y fue conocido por sus seguidores como Cristo, el Mesías. Sin embargo, fuera de la grilla hasta de las creencias o religiones, se extiende es un vasto territorio para la investigación, que sí deben seguir desenterrando las pruebas históricas y científicas para dar respuesta a varias dudas razonables o no: ¿realmente existió Jesús de Nazaret? ¿O es una tradición construida sobre una leyenda, como las de Robin Hood o el rey Arturo?
Las referencias escritas más antiguas sobre Jesús datan de después de su muerte: aparece por primera vez en las cartas de San Pablo, redactadas entre 20 y 30 años después de la crucifixión. San Pablo nunca conoció a Jesús, aunque según cuenta a Open Mind el especialista en estudios del Nuevo Testamento Simon Gathercole, de la Universidad de Cambridge (Reino Unido), “conoció a los discípulos de Jesús y también a sus hermanos” (en referencia sobre todo a Santiago el Justo, cuyo parentesco con Jesús es motivo de discrepancia entre distintos cultos cristianos).
Jesucristo es, sin duda alguna, la persona más influyente de la historia de la humanidad. A su lado, cualquier ‘influencer’ de nuestro tiempo quedaría en ridículo; nadie ha impactado tanto con sus palabras en el mundo durante tantos siglos. Sin embargo, el eterno debate entre eruditos y teólogos sobre la existencia histórica de su figura, es decir, sobre si realmente fue una persona de carne y hueso que realizó de manera más o menos parecida todo lo narrado en el Nuevo Testamento,sigue más presente que nunca.
Hay que preguntarnos, como cristianos y ciudadanos ¿Qué otra institución libera y fortalecen a nuestro espíritu y la moral o la ética? Pues hasta la SEP en México borró las materias de ética y filosofía, pero nuestra religión nos al aspecto moral o ético, nos acerca a Dios y nos dan la pauta de lo que debería ser nuestra vida aquí en la tierra, aunque pareciera que ante tantos homicidios y encarcelados por consumo de drogas no hemos alejado de él, de Jesucristo y no hemos aprendido a cuidar a nuestros hijos y a nuestros hermanos, tampoco en cuidarnos y respetarnos nosotros mismos en nuestra conducta, en honestidad y corresponsabilidad si eres servidor público, si no lo hacemos ¿cómo vamos apoyar a los demás?, quizás por eso sea más fácil seguir las reglas impuestas por la sociedad, el gobierno y por la iglesia.
El amor al prójimo es calzar los zapatos de otra persona, ponerme en su piel, acompañarle y sostenerle, saber que sus derechos y necesidades son las mismas que las mías, aceptar que en este planeta cabemos todos y que lo que produce la tierra es para el uso común y no para el beneficio de unos cuantos, es ser más humano. Amar al prójimo como a uno mismo. A veces esto no es así… pero creyendo que funciona el instinto de supervivencia, generalmente buscamos lo bueno para nosotros mismos y no para los demás. Así de simple y de complejo. Yo sí creo en él porque además de tener fé tuve la satisfacción de tener la acción divina de su presencia en el Santo Sepulcro en Jerusalén, Israel, y aquí debo hoy admitirlo.
Creo que todos nosotros, en los distintos espacios en que nos movemos o vivimos, tenemos la oportunidad de poner en práctica este principio básico que promovía Jesús de Nazaret, la de no hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti, actuando siempre con empatía y misericordia en nuestra relación con los demás, así de simple.
OBRADOR DECLARA QUE ES CRISTIANO “Soy seguidor de Jesucristo”, así lo aclaró el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, dijo que es cristiano, y soy seguidor de Jesucristo porque defendía a los pobres y estaba a favor de los oprimidos, dijo en conferencia de prensa. “En la Iglesia evangélica hay una denominación cristiana, pero mi cristianismo, lo que yo practico tiene que ver con Jesucristo, porque yo soy seguidor del pensamiento y de la obra de Jesús, creo que es el luchador social más importante que ha habido en el mundo, en la Tierra”, así lo afirmó el mandatario nacional. Dijo que todos viviríamos en una sociedad mejor si todos fuésemos más humanos, como en el cristianismo.