GENTE Y EDUCACIÓN, PRINCIPAL MOTOR DEL CAMBIO HACIA LA SUSTENTABILIDAD: ROSALBA THOMAS
*La UdeC, a través del CEUGEA, impartió el seminario virtual “Comunicación ambiental y sustentabilidad”.
Con la participación de alrededor de 50 universitarios que colaboran en los medios de comunicación de la Universidad de Colima, durante tres días de la semana pasada se realizó el seminario virtual “Comunicación ambiental y sustentabilidad”, impartido por la investigadora y académica del Centro Universitario de Gestión Ambiental (CEUGEA), Rosalba Thomas Muñoz, con el objetivo de promover y generar en los medios universitarios un papel transformador en cuanto a sustentabilidad y gestión ambiental.
Para inaugurar el evento, la directora del CEUGEA, Ana Stephanie Barrera González reconoció la iniciativa de la Coordinación General de Comunicación Social, la cual externó a través de su titular, Vianey Amezcua Barajas, el interés por sensibilizar en este tema al personal que labora en los medios institucionales: “Esperamos que a ésta le sigan nuevas actividades en las que podamos intercambiar aprendizajes y experiencias”, dijo.
Por su parte, la coordinadora general de Comunicación Social, Vianey Amezcua señaló que esta iniciativa surgió al identificar la necesidad de poner en sintonía a los medios de comunicación institucionales con los conocimientos relacionados a la gestión ambiental, tema con el cual UdeC se encuentra comprometida; “también es una gran oportunidad para aprender unos de otros, de incorporar el concepto de gestión ambiental a nuestro quehacer cotidiano y construir en favor de la Universidad”.
En el curso, la investigadora Rosalba Thomas señaló que la gestión ambiental es una herramienta que permite tomar decisiones más conscientes y responsables, tanto en lo individual como a nivel de las instituciones, gobiernos y el sector empresarial; en este sentido, continuó, “los medios de comunicación son un instrumento para crear conciencia, sensibilizar y transmitir mensajes e información relevante sobre el tema”.
Después, definió el concepto sustentable como un tipo de desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias demandas: “Es un paradigma que surgió en la Declaración de Cocoyoc (México, 1974) realizada por la ONU, poniendo el énfasis en el desarrollo a futuro”.
Al hablar de algunos problemas sobre los cuales la gestión ambiental pone su atención y que es urgente atender, mencionó los siguientes, según la ONU y su Agenda 2030: El cambio climático o calentamiento global, la destrucción de la capa de ozono, el deterioro de ecosistemas críticos como la Amazonía y la Antártida, la contaminación de los océanos, los derrames de petróleo, la disponibilidad de agua a nivel mundial y la lluvia ácida, entre otros.
En el caso de México, la experta señaló que existen más de 500 conflictos ambientales relacionados con la minería, la producción de hidrocarburos, el gas y el fracking (fracturación hidráulica para extraer más gas y petróleo) los cuales han generado desequilibrios locales y regionales: “Algunos de los retos más importantes de la gestión ambiental son detener la deforestación, impulsar el manejo forestal comunitario, hacer frente al cambio climático, cambiar el rumbo energético, trabajar en la conservación de la biodiversidad en comunión con el bienestar de las poblaciones, analizar las concesiones de minería y fracking, y fomentar una mayor conciencia ambiental”.
Sobre el concepto globalista de la sustentabilidad, dijo que éste sólo puede existir en la práctica de contextos locales; es decir, mediante acciones en nuestro entorno que, sumadas, generen un impacto global: “La clave es configurar ambientes en los que podamos sentirnos gratificados cuando actuamos para contribuir a objetivos compartidos”.
Por último, Rosalba Thomas habló sobre algunas acciones que pueden contribuir a la gestión ambiental desde entornos locales, tales como fomentar una educación crítica, promover un sentido de pertenencia, difundir más expresiones culturales y artísticas, aprovechar las tecnologías de comunicación y reconocer en los otros empatía, solidaridad y significados compartidos: “El principal motor del cambio es la gente y ésta cambia a través de procesos educativos”.