IGLESIA DE RANCHO DE VILLA A LA ESPERA DEL COMPORTAMIENTO DE LA PANDEMIA PARA REALIZAR FIESTAS
El padre de la Iglesia Santuario del Señor de la Expiración en Rancho de Villa, Gerardo López, indicó que están a la espera del comportamiento de la pandemia para determinar las actividades a realizar por los festejos de la iglesia.
“Estamos en espera de cómo se comporte esta pandemia de aquí a un mes o dos, porque como sabemos en enero son nuestras fiestas y es un gran evento para nuestra diócesis, para la gente, el año pasado cancelamos muchos eventos de esta índole porque no se pudieron realizar, hoy la gente está con ese ánimo de saber si van a ser posibles o no, depende de cómo se comporte la pandemia para ver si se podrán realizar algunos actos públicos que se hacen todos los años, como la entrada del señor que viene desde Coquimatlán, principalmente ese es el acto que estamos buscando la forma de rescatarlo y de que se realice”, comentó.
Señaló que las fiestas de la iglesia son del 8 al 18 de enero, donde puntualizó que es un Cristo muy querido por la comunidad.
“Aquí las fiestas principales son en enero, del 8 al 18, y de ahí en más es una tradición que toda la gente viene los martes, el martes del Señor de la Expiración, es nuestra principal fiesta, sobre todo recordar en el momento en el que Jesús da nuestra vida por nosotros, es un Cristo que tiene una historia muy bonita aquí en la comunidad y mucha gente que se ha visto beneficiada por sus milagros”, explicó.
Gerardo López destacó que en la iglesia se están cuidando los protocolos para evitar contagios, en especial en el día con mayor afluencia de personas, que son los martes.
“Estamos cuidando los protocolos de prevención que se han estipulado, los martes que es el día principal tenemos una entrada y una salida vigilando que la gente lleve puesto su cubrebocas, y hasta el momento todo ha concurrido con paz y tranquilidad. Hemos tenido algunas dificultades con gente que no ha querido acatar las normas, pero al final todo ha transcurrido de una manera normal”, dijo.
Abundó que se supervisa el cumplimiento de todos los protocolos desde la entrada hasta la salida de los creyentes.
“Desde que comenzó la pandemia y desde que nos permitieron volver a abrir el templo, solo hay una entrada y una salida, ahí en la entrada tenemos tapete sanitizante, líquido para las manos, y estamos controlando la temperatura, y le pedimos a la gente que entre con cubrebocas, no dejamos pasara nadie si no trae cubrebocas y al interior del templo tenemos separados los lugares”, refirió.