JUAN CÉSAR UN JÓVEN EJEMPLAR DE TEPAMES – ANÁLISIS POLÍTICO
Por Abel González Sánchez
El ejercicio del análisis político es muy amplio por los temas que se pueden abordar, temas gubernamentales, legislativos, partidistas son los comunes, pero hoy lo hacemos en el tema religioso, porque hubo un gran júbilo en el pueblo de Tepames el pasado sábado 3 de julio de 2021,pues la iglesia de San Miguel Arcángel estuvo abarrotada por muchas familias y por bastantes adolescentes para celebrar una misa especial con la presencia de un joven ejemplar del lugar, Juan César Carrasco Martínez por su reciente ordenación Diaconal en California,lo acompañaron cuatro sacerdotes locales, y a la salida del templo, las familias entusiasmadas le llevaron mariachi y banda para recorrer el centro de la población.
Juan César es un joven talentoso de Tepemes que se forjó con muchos sacrificios personales y familiares desde su infancia, pasando su experiencia también como monaguillo en el templo del pueblo, estudio en el Seminario de Colima durante un tiempo y terminó sus estudios religiosos en el Seminario de California hasta lograr su ordenación recientemente como Diácono en la Basílica de los Ángeles, California,es hijo de Zenaida Martínez Sánchez quien lloró de felicidad por ver a su hijo ya ordenado como Diácono, participando en la misa, los sacerdotes que lo acompañaron le sugirieron a Juan César para que le diera la bendición especial frente al pueblo a su madre, su hermano, padre y familia.
CAE LA VOCACIÓN SACERDOTAL EN MÉXICO En Colima, en todo el país y en el mundo ha caído gradualmente la vocación sacerdotal en los últimos 15 años, las tecnologías han provocado que las nuevas generaciones de jóvenes se estén apartando mucho de la formación moral y espiritual, ahora las profesiones más buscadas son aquellas en las que rápidamente puedes ganar más dinero y comprarte un carro, los jóvenes tampoco quieren perder tanto tiempo estudiando para lograr sus certificados o títulos, ahora casi se los regalan, pues logran sus licenciaturas vía fastrack, y sin asistir en forma presencial, no como lo hacíamos antes, anteriormente se estudiaba hasta seis o cinco años continuos y sin faltar un día a clases para realizar una carrera profesional, hoy la modernización lo cambio todo, así nos dicen, pero más bien es parte de la corrupción generalizada en los sistemas educativos federales, estatales y más privados, las escuelas privadas y las Universidades buscan también como enriquecerse, no tanto formar buenos profesionistas comprometidos con el estado y el país.
NO ES LO MISMO SER ABOGADO QUE SACERDOTE Pero volviendo al tema religioso, la pérdida de la vocación sacerdotal es un fenómeno internacional que preocupa a la Iglesia católica, pues no es lo mismo inscribirse en la Universidad para ser abogado, contador, doctor o ingeniero, que decidir estudiar para ser sacerdote, pues muchas profesiones son muy comunes, pero no para estudiar y ser un diácono o presbítero, los miembros de la familia y más los padres de familia se ponen nerviosos cuando alguien de la familia pretende tomar esta decisión, porque saben que es un asunto muy serio, no controversial, porque es decisión personalísima, y muy importante para la vida futura de quien lo desea, porque se somete al compromiso moral, familiar y espiritual con la iglesia católica y con la sociedad, porque será esa su profesión o camino para toda su vida, no es decisión simplista para haber que pasa como muchos profesionistas que hasta se arrepienten de lo que estudiaron o solo lo hacen para tener su certificado para ver si le cae algún empleo.
Hace 40 o 50 años el sacerdocio las familias promovían a sus hijos para dedicarse a la actividad religiosa, pues era visto en aquel tiempo como una gran oportunidad de poder ayudar a mucha gente, pero las nuevas generaciones de jóvenes y padres de familias ya piensan diferente, en diálogo sobre el mismo tema varios jóvenes señalan que deberían reformar las normas religiosas, ya que deberían permitirlos casarse, tener hijos y esposa, es asunto relevante.
GOBIERNO Y UNIVERSIDADES SIN ESPIRITUALIDAD Los gobiernos y también las universidades han perdido dentro sus planes de trabajo y de servicio comunitario los valores humanos, no tienen espiritualidad, la SEP y las universidades ya borraron también de los planes de estudio a la ética, la moral, la filosofía, los valores humanos, pues la espiritualidad es un valor positivo y superior necesario, ya que es una cualidad que determina, en la mayoría de los casos un comportamiento coherente con los valores morales y éticos que ayudan al desarrollo individual, de la persona, de la misma familia y sociedad.
Son muchísimos países que promueven la espiritualidad y las religiones porque saben que son parte del trabajo social para promover la convivencia, el amor, apoyo y respeto a sus semejantes, evitan la criminalidad y brutalidad de las organizaciones criminales, la biblia es la guía para la familia, para lograr una sociedad más organizada, por ello algunos países hasta utilizan a la biblia en el juramento al tomar posesión y cargo como presidentes, como lo hace Estados Unidos. En síntesis valoramos la decisión de nuestro sobrino Juan César Carrasco Martínez, quien va por ese camino religioso, esperamos que logre su objetivo espiritual, como dijo Aristóteles la felicidad es el máximo objetivo del hombre, es el bien supremo y objetivo final, la paz interior es lo que buscamos y Juan César va avanzando, ¡Felicidades!