“LEYENDA DE LA NOVIA APARECIDA EN LA CARRETERA DE COMALA A VILLA DE ALVAREZ”

Continuamos compartiendo algunos de los muchos cuentos y leyendas que tenemos en nuestro lindo pueblo y esta; que hoy traemos surgió, hace como 45 o 50 años y muchos de los chavos de aquellos tiempos las escuchábamos a menudo y éramos presa fácil de ese miedo que nos abriga, cuando por necesidad teníamos que acudir a Colima y nos quedábamos hasta muy tarde y los camiones de pasajeros de Comala, solo trabajaban hasta las 10 o 10:30 de la noche.

Yo en esos tiempos cursaba mi educación secundaria en el Cecyt # 80 y por necesidad de algunas materias teníamos que hacer trabajos en grupo y en varias ocasiones me tuve que ir y regresar a mi pueblo en bicicleta a deshoras de la madrugada y pues ustedes sabrán lo que significaba regresarte solo al pueblo por una carretera de dos carriles únicamente y a esas horas la oscuridad hacía que se vieran sombras fantasmales por doquiera, solamente iluminaba  camino con un farito de un dinamo en la bicicleta y cualquier sombra al moverse las hojas de los árboles, figuraban espantos y fantasmas que amenazaban con llevarnos a su lúgubre morada.

Pero bueno amigos, dice la leyenda que  en Comala un día como cualquiera, era un día especial para una pareja de enamorados pues celebrarían su boda en domingo a las 5 de la tarde junto con todos sus familiares y amistades. Al entrar el novio a la iglesia de repente se escucharon varios disparos, y el novio cayó al piso sin alcanzar a despedirse de su amada porque pronto cerró sus ojos y murió. La novia no lo podía creer gritando desaforada tanto que quedo muda y nunca más volvió a pronunciar palabra, quedo con un trauma pues no podía superar que en ese día tan especial haya perdido a su novio.

No comía, no salía no hablaba con nadie. Cuentan las personas que todos los domingos a las 5 de la tarde muy puntual ella iba a la iglesia vestida de novia con la ilusión de ver a su novio esperándola en el altar para llevar a cabo su boda. Así pasaron años y años hasta que un día ella murió en la carretera a la salida de Comala debido a un accidente donde fue espantosamente atropellada.

Cuentan que por las tardes al escucharse las campanadas de la iglesia la gente ya sabía que en la puerta mirarían a una mujer vestida de blanco. Pero ya no era ella; era su alma que por no poder llevar a cabo su sueño, no podía descansar y así la gente la llamo “la novia de Comala”.

Dice mucha gente que todavía la han visto vagando por la carretera a la salida de Comala vestida de blanco con su vestido de novia.

Del asesino del novio se supo que fue un hombre despechado por María y juro que nunca llegaría al altar a casarse después se supo que murió a los pocos días del asesinato mordido por una víbora de cascabel y lo encontraron a los muchos días de putrefacción y comido por los zopilotes.