LOS CANALES DE LA UNIDAD PADRE HIDALGO SE CONSTRUYERON HACE 64 AÑOS PARA EVITAR INUNDACIONES
Los canales del Seguro Social, ubicados al costado de la Unidad Padre Hidalgo de la ciudad de Manzanillo es un sitio con mucha historia, ya que hace 64 años se construyeron para evitar inundaciones en cada temporada de lluvias en esa colonia.
En 1959, Manzanillo sufrió el peor desastre natural de su historia, cuando el 27 de octubre de aquel año un ciclón tropical en el Pacífico, al que localmente se le bautizó como “Linda”, afectó fuertemente a la región, azotando como categoría 5 al puerto colimense, causando muchas muertes, la mayoría de las cuales quizá nunca se conocerán, pues fueron tantos los fallecidos que algunos tuvieron que ser arrojados a la fosa común para evitar epidemias, mientras que otros quedaron sepultados por grandes capas de lodo formadas tras los aludes.
Las partes más golpeadas fueron el barrio de La Pedregosa y los sectores o asentamientos cerriles de la ciudad, donde la mayoría de las casas eran de madera y materiales endebles y donde el terreno era inestable, sujeto a grandes deslaves de tierra, junto con enormes rocas que también fueron arrastradas con su desplome.
El gobierno federal de aquel entonces, encabezado por el Presidente Adolfo López Mateos, mandó construir una colonia a la orilla de la ciudad del lado de la laguna de Cuyutlán, paralela a La Pedregosa, extendiéndose los terrenos urbanos más allá de donde culminaba la calle México.
Fue así cómo, en un tiempo récord se construyó la Unidad Padre Hidalgo, lista para inaugurarse y entregarse las casas en 1960, pero como las personas de los sectores no quisieron habitarla, la colonia se llenó de maestros, abogados y trabajadores del propio Imss. Al lado izquierdo de la colonia se hicieron unos canales destinados a evitar que el nuevo asentamiento citadino, edificado sobre rellenos al mencionado vaso lacustre se inundara.
Son cuatro canales que forman un vaso regulador con salida a la laguna, a pesar que se han dado grandes inundaciones y que hasta la fecha en las primeras tres cuadras de esta colonia aún se dan algunos anegamientos cuando caen lluvias torrenciales, si no existieran estos canales, los grandes encharcamientos serían mucho peores en cada temporada lluviosa.
A lo largo del primer canal en el espacio entre los canales y la laguna se asentó el casino o lugar de fiestas del Club de Leones, sitio en el que en sus años de gloria se presentaron grandes artistas de fama nacional por aquellos tiempos, como Los Bukis, Chico Che y La Crisis y La Banda Machos, entre muchos otros.
Junto a los canales del seguro hay una importante parada de camiones y la entrada al Club de Leones.
Por aquellos años, 60 y 70, existió un gran aprecio y afición por el teatro en Manzanillo, así como representaciones culturales con cantantes y comediantes locales. Primeramente, estos aprovechaban el teatro en la escuela Juárez que se ubicaba a un costado del antiguo jardín Galván y luego se trasladaron al lado de la parroquia de El Carmen, donde en un terreno baldío el grupo cultural levantó un pequeño espacio para expresar sus necesidades culturales.
Eran liderados, entre otros, por Don Alfredo Cruz Torres, que lo mismo escribía y dirigía dramas y comedias que también recitaba emotivamente, pues era un gran declamador. También se presentaban comediantes e imitadores, principalmente fono-mímicos; es decir, los que hacían ademanes con base a la pista de algún cantante famoso con gran maestría, disfrazados acordes a su acto. Cuando la parroquia peleó estos terrenos, ese grupo, antes Heliodoro Trujillo y Ángela Peralta, se trasladó a los canales del Seguro Social, bajo el nombre de Teatro México.
A pesar que se trataba de un espacio menor y estar en un edificio nada elegante ni bonito, vivió también su etapa de gloria, donde destacara entre otros el popular “Fígaro”, Ángel Mora Flores, conocido peluquero y activista social, que también tenía inquietudes culturales. Cuando allá por los años 80 empezaron las luchas de los colonos por hacer propio el patrimonio que tenían en la Unidad Padre Hidalgo, las reuniones de éstos se verificaban cada semana o cada dos en el local del Teatro México.
Los vecinos fueron encabezados en su lucha por su líder Don Humberto Jaramillo, conocido popularmente por “El Pulpo”, quien buscó la manera de que los colonos pudieran comprar sus casas, primero logrando que se congelaran las rentas y después descubriendo que para ese entonces el dueño de la colonia ya no era el Imss, sino el Banco Obrero, al que finalmente se le pagó cada predio. Uno de los últimos grandes eventos ahí, fue cuando se presentó por una temporada la Carpa Ofelia con gran éxito.
Posteriormente, decayó el interés por el teatro en Manzanillo y el lugar pasó a ser un taller, donde un joven, Ramón Medina Archundia, empezó a alimentar a las iguanas que llegaban a buscar los frutos que había en los árboles al pie de los canales. Al empezar a alimentarlas con sobras de alimentos y fruta que él mismo conseguía, el número de iguanas empezó a aumentar considerablemente.
Hay que decir que durante los años 70 y 80, los niños de la colonia tenían la costumbre de ir a apedrear a las iguanas a la salida de sus clases en la primaria Padre Hidalgo, sitio en el que también vivía un conocido indigente conocido como “El Pato Buzo”. Pero el señor Archundia empezó a proteger a las iguanas y alejar a los niños que cometían estas travesuras mal encaminadas, que tanto daño le causaban a la fauna, pues en el lugar también había otras clases de especies de animales, como tortugas y aves de diferentes tipos.
Cuando las familias de Manzanillo querían saber al momento el parte del tiempo, muchos acudían en sus vehículos o incluso en bicicleta hasta las puertas del observatorio, para preguntar directamente a quienes estaban de guardia cómo se encontraban las condiciones del tiempo y éstos les informaban amable y detalladamente.
Cuando el tianguis, que se colocaba primeramente en la prolongación Madero, bajó el número de comerciantes y clientes por diversas razones, ya por allá a mediados de los años 90, éstos decidieron trasladarse a los canales, donde aún continúan instalándose cada semana, aunque el número de clientes ha descendido considerablemente, así como el número de tiangueros.
El 9 de octubre de 1995 hubo un fuerte terremoto que dañó al antiguo mercado municipal 5 de Mayo, por lo que todo el tiempo que duró la construcción del nuevo del actual, el mercado subsistió en el área de los canales del Seguro Social, tiempo en el que se hizo famoso un cocodrilo que salía a asolearse al pie de un canal, ya sea el tercero o el cuarto, que era por donde el saurio se movía, y era alimentado por los locatarios. Ahí se construyeron canchas deportivas de futbol y basquetbol, como parte de las instalaciones de esta clase que se construyeron entre la UPH y La Alameda.
Este espacio entre los canales y la laguna se ha convertido en un sitio de amortiguamiento para el impacto urbano sobre la fauna que ahí se resguarda, ya que en su parte primera se arremolinan las iguanas, en las aguas hay muchas aves y reptiles, como son los caimanes o cocodrilos. Al fondo, en el espacio que es conocido como El Pastito del Seguro Social, hay una especie de selva, donde hay mapaches, tejones, culebras, roedores de toda clase como topos, ardillas, aves, caimanes, etc.