NO HAY PERDÓN NI OLVIDO PARA TEY
La contención de la crisis política que vive la alcaldesa Tey Gutiérrez ha escalado a niveles en los que se han activado todos los planes de distracción por parte de su dirección de comunicación social, misma que les cuesta 16 millones de pesos a los contribuyentes y que está al servicio de la alcaldesa. Después de desaparecer por completo de la vida pública a consecuencia de la balacera en la cabalgata de mujeres, donde hubo un muerto y 17 heridos y cuyo objetivo era el asesinato de su hijo; la alcaldesa reapareció en un evento organizado por el DIF villalvarense donde tomó protesta a las y los integrantes de la Red de Impulsoras e Impulsores de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes del Municipio, evento realizado obviamente para blanquear la imagen de Tey y presentarla como una mujer impoluta.
Su equipo de comunicación social sigue el claro manual de contención de crisis política, practicando la distracción como estrategia publicando notas que ponen al municipio como un ente pulcro presumiendo que son el único municipio sin montos por aclarar de fondo de infraestructura o bien minimizando la tragedia de la balacera simplemente ignorando que esta haya ocurrido. Mientras tanto, en redes sociales la ciudadanía hace escuchar su voz y ha comenzado una ola de publicaciones que exigen justicia y transparencia.
Lo cierto que es que lejos de apariciones públicas como la del evento con estudiantes, apariciones claramente preparadas, la ciudadanía tenía semanas esperando que la presidenta saliera a dar la cara ante el hecho sucedido en la cabalgata, dar razones de los ocurrido, aclarar si su hijo fue el objetivo o no y por qué; dar explicaciones de las investigaciones, sin embargo, el ocultarse fue la estrategia de la alcaldesa esperando que se asentaran las aguas. No obstante, las aguas no se asentaron, al contrario, se pusieron más turbulentas con los ciudadanos comentando en las publicaciones en redes sociales del ayuntamiento sobre el mal estado de las calles, las condiciones de inseguridad y la falta de resultados en general del gobierno de Tey.
Lo último, demuestra que la población no cae en las trampas del Ayuntamiento con sus intentos de distraer la atención y que la sociedad ya le está cobrando las cuentas a la alcaldesa de la manera más cruda; a través del repudio social. Como hemos señalado, Tey ya está muerta políticamente, tanto es la desesperación que se dice que su coordinador de comunicación ya anda haciendo campaña por el partido oficial para que puedan cobijar a Tey de sus errores.
