OPINION

TONALTEPETL – 10 DE MAYO 2021

Gustavo L. Solórzano

Es necesario recordar que durante muchos años la salud mental estuvo un tanto cuanto relegada y en ocasiones se habla hasta de serios abusos sufridos por los enfermos. Hoy en día, los enfermos mentales han ganado un espacio digno para su atención y en su caso, recuperación. Mientras tú dices que es imposible, hay alguien que ya lo está logrando, vamos por una salud mental digna.

  El 03 de noviembre de 1982 nació el hospital de Ixtlahuacán, como una clínica del IMSS-Coplamar, brindando sus servicios con especialidades básicas con personal en formación, en el último año (Medicina Interna, Cirugía, Gineco-Obstetricia, Pediatría y Anestesiología). Según datos históricos, es hasta 1986 cuando pasa a formar parte del inventario de la Secretaría de Salud.

Es en el año de 1991 cuando nace el pabellón psiquiátrico, mismo que al decir de algunos profesionistas en la salud, no está apto para funcionar como tal en la actualidad. Lo anterior, por no contar con las áreas adecuadas acorde a la norma, ni el personal suficiente y especializado para brindar ese servicio, sin embargo, lo hacen. (Gracias a Dios)

Digo gracias a Dios porque si no lo hicieran, aun con sus deficiencias, habría un caos. Como en otros lugares de nuestro mundo, Colima tiene serios problemas con la salud mental, principalmente con la que se deriva de personas indigentes que deambulan tristemente por las calles de nuestra ciudad y otros municipios. Naturalmente también se requiere para aquellas personas que son víctimas de adicciones y otros aspectos como la esquizofrenia, trastornos bipolares, etc. De ahí que sea tan importante el apoyo que recibe la ciudadanía no solo del área de hospital sino también del pabellón. En este tipo de circunstancias, es necesario que la familia de las personas afectadas coadyuve responsabilizándose al cien por ciento del tratamiento y seguimiento del caso que les corresponde.

Desde hace años, las personas que sufren esquizofrenia conforman el mayor padrón de atención en el pabellón de Ixtlahuacán. Es un factor que vulnera la salud mental de los colimenses y se considera una patología delicada. En la esquizofrenia se produce una alteración de la percepción de la realidad y para su estudio y atención se ha clasificado en cinco tipos: paranoide, desorganizada, catatónica, indiferenciada y residual. Siendo de las anteriores las mas peligrosa la desorganizada, pues quien la padece es incoherente al hablar, actúa de manera extraña y las reacciones emocionales pueden ser absurdas y su inicio suele ser temprano e insidioso, es decir, comienza lentamente, y no tiene síntomas obvios al principio. La persona no está consciente de que la enfermedad se está presentando.

La visita que realizó el pasado 9 del presente, la comisión de los derechos humanos en nuestro estado, a fin de constatar las condiciones en que se encuentran los internos y conocer de las necesidades existentes. Sirvió para que el director del pabellón diera a conocer algunas carencias, como la falta de personal especializado para poder atender la consulta que reciben.

Derivado de dicha visita, se sabe que el pabellón funciona acorde a los protocolos establecidos.

Expreso desde estas líneas, un reconocimiento a todo el personal que ahí labora, por su dedicación y esfuerzo continuo en bien de la salud mental.  

ABUELITAS:

El calor de Colima está en pleno, es necesario tener cuidado con los alimentos para evitar su descomposición y con ello, el riesgo de infecciones al ingerirlos. Importante también hidratar principalmente a los menores y a las personas ya mayores para evitar riesgos en su salud. Contribuyamos en el cuidado de nuestra salud y la de nuestros familiares. Ante cualquier síntoma extraño, acuda a la atención médica. Es cuanto.