OPINION

TONALTEPETL – 14 DE AGOSTO 2024

Gustavo L. Solórzano

Héctor Manuel Galindo Vázquez, llegó a la Cruz Roja como la mayoría de los que servimos a la Benemérita institución, joven, con ganas de servir y con propuestas. Hoy ocupa el cargo mas alto al que puede aspirar un servidor voluntario, Delegado estatal. No ha sido fácil, le tocó la pandemia y con ella, una crisis financiera que ha golpeado a todas las instituciones. En este caso, es diferente, porque para servir a la sociedad, circo, maroma y teatro, son poco, para poder solventar las múltiples necesidades que la Cruz Roja requiere y así, poder atender las emergencias. Y sí, en ocasiones se falla, mas no es por falta de voluntad, sino por falta de recursos para la compra de unidades.

Es necesario tener presente que, en su mayor parte, La Cruz Roja Mexicana subsiste y se mantiene gracias a las donaciones que recibe de los ciudadanos, de algunas empresas y de las instituciones hermanas como el ejército, la policía y la marina, a través de la colecta anual que realiza. Otro apoyo sumamente importante e indispensable, es el de los gobiernos, cuando apoyan. Cuando no, es peor el batallar y en consecuencia los servicios que brinda la institución, se vuelven deficientes y riesgosos para la ciudadanía.

Cuando era un niño de ocho o diez años, llegué a la Cruz Roja, conocí a gente muy valiosa que hoy ya no está. Estoy en plena conciencia de que problemas siempre han existido, malos entendidos, diferencias de criterio y porque no decirlo, hasta envidias. Es una casa de humanos, afortunadamente los valores y principios que legó Juan Enrique Dunant, fundador de la sociedad de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, han permitido que se mantenga la unidad. Siempre en bien de la sociedad, siempre sin distinción de credo, raza, nacionalidad o condición social.

Por ello, la creatividad acompañada del respaldo social, han contribuido al logro de recursos adicionales y por ende, de mejoras institucionales. Insisto, no es fácil administrar y satisfacer requerimientos urgentes como: renta, mantenimiento de unidades, compra de medicamentos y de materiales diversos, gasolina, refacciones, pago de personal, luz, agua, teléfono, etc. Y muchos etc. Mas, un padre o madre de familia podrá entender con claridad a lo que me refiero. Por eso, la Cruz Roja pide, y pide, y pide; para así poder ayudar y servir con eficiencia y prontitud.

Qué bueno sería que tuviéramos un modesto centro de atención prehospitalaria y una ambulancia por cada colonia, y no es utopía. Sería ideal que los ayuntamientos de nuestro estado realizando un gran esfuerzo con los diputados y la titular del ejecutivo, pudieran hacerlo y que no ocupáramos a la Cruz Roja. Qué bueno sería que, al margen de los colores partidistas, los tres niveles de gobierno y la sociedad que somos sus jefes, pudiéramos vernos como uno solo, en materia de seguridad física y emocional. Insisto, nos es utópico, con un mucho de voluntad y un poco de dinero, pueden lograrse muchas cosas.

Ahora que, mientras eso no suceda, sería muy bueno que los esfuerzos institucionales se avocaran a fortalecer a la Cruz Roja, y a los Bomberos. Para que los voluntarios no tuvieran que exponerse en colectas, de esas en las que algunas personas dan lo que les estorba en la bolsa de su pantalón. Morralla solamente o escuchar “Ya cooperé”, frase que frustra y desanima en muchas ocasiones, en otras, es un acicate para seguir dando amor a la sociedad. Jamás lo olvide, en Colima, la Cruz Roja es de todos.

ABUELITAS:

Al igual que en otros años, la Cruz Roja en Colima ya prepara la quinta edición de la gran carrera “Todo México Salvando Vidas”. Misma que habrá de realizarse el 8 de septiembre a las siete de la mañana en tres categorías. 3, 5 y 10 kilómetros. Aaron Garibay es quien coordina, y usted puede localizarlo en el 312 174 10 01 para inscribirse y contribuir con ello, a seguir mejorando los servicios de nuestra Cruz Roja. Playera, medalla, hidratación, un complemento alimenticio, actividades recreativas el día del evento y sobre todo, el gusto de servir a una noble causa, seguir salvando vidas. Eso y más es lo que incluye tu inscripción. También está disponible el número de cuenta 0195656265 en Bancomer, con CLABE 01 2090 0019 5656 2657, todo a nombre de Cruz Roja Mexicana IAP. ¿Se anima amable leyente? ¡Apoyemos! Es cuánto.