ÚTIL EL TRÁMITE DE DICTAMEN DE USO DE SUELO PARA EL DESARROLLO INMOBILIARIO
La falta de certidumbre en la tenencia de la tierra ha perjudicado en desarrollo inmobiliario en el estado, por ello es conveniente el trámite de dictamen de uso de suelo, que está emitiendo el municipio de Manzanillo, como requisito para cualquier movimiento de cambio de propiedad o aprobación de nuevos desarrollos inmobiliarios, construcción de vivienda o proyecto comercial.
No es sencillo cumplir con toda la tramitología, se requiere el trámite de factibilidad de agua potable, que demanda requisitos específicos, como acreditación de la propiedad de la tierra, ubicación y declaración de cuál es el objetivo de solicitud de abasto de agua potable, una vez obtenida llevarla a Desarrollo Urbano junto con el certificado de libertad de gravamen y escritura pública que acredite derechos de posesión, un levantamiento topográfico, pago de predial actualizado.
Es un cuanto laborioso reunir todos estos requisitos, pero el dictamen emitido acredita que toda la información del predio está debidamente certificada por el área de Desarrollo Urbano, además de los usos de suelo permitidos o potenciales sujetos a aprobación, lo que sirve ya de base para la notarización de cualquier movimiento de propiedad, para fines comerciales, transferencia de dominio, donación y para aprobación de planes parciales de desarrollo y licencias de construcción.
En caso de propiedad ejidal, la exigencia es contar con dominio pleno de la parcela, para la venta legal, como lo determina la Ley Agraria, el artículo 27 de la Constitución y aquí es importante aclarar que si bien aproximadamente 80% de la tierra de Colima está bajo régimen ejidal, muy pocas parcelas han tramitado su desincorporación del Registro Agrario Nacional, aun cuando muchos ejidatarios quieren vender, pues las nuevas generaciones ya no tienen interés en trabajar la tierra y migran a las ciudades o se van a trabajar a los EU.
Gran porcentaje de la tierra ejidal está ociosa, o poco aprovechada, o sujeta a especulación inmobiliaria como el caso de las delegaciones de El Colomo y Campos del municipio de Manzanillo, donde cuentan con uso industrial de alto, medio y bajo impacto, con precios millonarios por hectárea, pero sin contar muchos de ellos con el dominio pleno, lo que ha propiciado operaciones inmobiliarias ilegales o especulativas.
