EL MENSAJE POLÍTICO – HUMANITAS
Mtra. NIKOLA VARGOVA
Ya estamos en los tiempos que cada día se más acercan las elecciones. A parte de las promesas políticas de los candidatos políticos, diario estamos escuchando en el radio o en la televisión los anuncios con algún tema político como los mensajes políticos. Está bien cuando un partido político está anunciando sus proyectos o acciones positivas para la sociedad con el objeto de ayudar a los grupos vulnerables o las personas con el nivel económico más bajo, o ayudas para los empresarios que se quedaron afectados por la crisis producida como efecto de la pandemia. ¿Pero es correcto cuando un partido o algún candidato deja mensaje político hablando mal de otro candidato?
El anuncio negativo como mensaje en la campaña política puede parecer que tiene una relación firme con el derecho a la libertad de expresión, pero en ciertos límites. Precisamente los anuncios deberían tener una estricta regularización, por ser un área tan compleja que finalmente puede afectar a su receptor. En nuestro ámbito jurídico existe una Ley General de Salud en Materia de Publicidad que tiene la finalidad de evitar que se propicie publicidad que intente poner en riesgo la seguridad, integridad física y mental o dignidad de las personas. Existe una ley federal de protección al consumidor y también de la competencia económica, pero no existe la ley de la protección del elector o de la competencia electoral. Muchos países el tema electoral en relación con la publicidad tienen regularizado como practicas no permitidas en los anuncios donde entre ellos se encuentra también anuncio negativo. Nosotros señalamos el anuncio negativo como la violencia política. Ya está. Así pasa que los candidatos se están denunciando entre sí mismo, por la violencia política, aunque muchas veces es difícil buscar los elementos suficientes para integrar una investigación. El anuncio negativo es también anuncio y finalmente tiene su influencia en la evolución de la opinión de un partido o del candidato político. En relación con la publicidad hablar sobre los anuncios, es como buscar el fondo en el océano. El anuncio negativo puede tomarse como una comparación, que finalmente en las practicas mercantiles está prohibida, o puede relacionarse con los derechos del autor, pues la ideología de un partido es como su patente y utilizarlo en el anuncio de otro partido, aunque en la forma negativa finalmente debería ser prohibido.
Somos humanos y sin buscar la razón porque, en nosotros mismos tenemos que admitir, que nos gusta escuchar hablar mal de otras personas, que, aunque no creemos en las nuevas promesas, nos gusta escuchar en lo que fallaron los partidos políticos anteriores. Hablar mal de alguien es un acto negativo, no genera crecimiento sino todo lo contrario. Es un acto de violencia, que genera más violencia y finalmente parece que se va a terminar únicamente introduciendo las sanciones. Más humano es dejar un mensaje positivo, buscar algo positivo que los gobiernos anteriores hicieron para la ciudadanía y con esto construir un anuncio con un mensaje político positivo, una promesa o visión que podemos cumplir, porque alguien ya logró cumplirla y más que esto, para dejar en la ciudadanía un mensaje moral y lleno de la educación que suma y une el tejido social.