NO SE PROPORCIONA INFORMACIÓN DEL TRATAMIENTO NI DE RIESGOS A VACUNADOS
De acuerdo a lo que establece el art. 4 de la Constitución, art. 80 y 82 del Reglamento de la Ley General de Salud y la NOM-004-SSA3-2012 y del expediente clínico, fracción 10.1. a la 10.1.4. todo paciente, que vaya a recibir un tratamiento médico, debe estar debidamente informado de lo que se le va a aplicar, del procedimiento y los riesgos que ello implica.
Ahora que el sector salud, está aplicando la vacuna contra el Covid-19, se debe cumplir con estas disposiciones legales, para poder aplicar el tratamiento, nos hemos dado cuenta que, la población en general, no se le informa prácticamente nada de estas obligaciones que marca la ley.
En otros casos, a algunos empleados del gobierno del Estado y a maestros estatales, se les está haciendo firmar, el formato de autorización consensuada, sin que sea cierto que les dan la información como lo dice el documento.
Este documento, fíjese lo que señala:
“Autorizo por mi propia voluntad y con pleno conocimiento de causa, recibir la vacuna para SARS-CoV-2, después de haber recibido la información completa sobre las características del biológico, la cual me fue brindada de forma amplia, precisa y suficiente, en un lenguaje claro y sencillo, informándome además de los posibles riesgos, complicaciones y posibles reacciones adversas; también fui informado de mi derecho a revocar esta autorización en cualquier momento otorgo mi autorización al personal de salud para atención de contingencias y urgencias derivadas del tratamiento, atendiendo al principio científico y ético de la libertad prescriptiva, buscando siempre el beneficio del paciente.”
“Riesgos inherentes al tratamiento con terapia biológica: reacciones en el sitio de inyección, reacciones alérgicas, posibles reacciones adversas con cefalea, ojos llorosos, malestar general, picazón, hinchazón de labios y lengua, dificultad para tragar, ronquera, pulso débil, mareo, desmayo, sensación de presión, paro cardiaco, falta de aire, tos, diarrea, vómito, calambres abdominales y demás efectos adversos conocidos y citados en la guía técnica de la citada vacuna y las aún no documentadas.”
Nomás de verlo, te sientes extraño, imagínese, quizá por eso no les den una información detallada, -como dice que sí lo hacen- simple y sencillamente, llegan y les aplican la vacuna.
También se tiene conocimiento que aquellos maestros que no quieren firmar este documento, reciben presiones y se les dice, que, en caso de no hacerlo, podrían tener consecuencias, a pesar de que, este mismo documento que están firmando, les da el derecho, de que si después de decirles las consecuencias y los riesgos, deciden no vacunarse, se les tiene que respetar, pero no tiene por qué haber ninguna consecuencia en su relación laboral.
Es importante, que la Comisión Estatal de Derechos Humanos, investigue estas denuncias, a fin de que asesore a las víctimas; por un lado, llamar la atención al sector salud, de que, a todo aquel que vaya a vacunarse, se les informe sobre el tratamiento y los riesgos que ello implica.
Lo anterior debido a que, es un derecho que tienen, que al someterse a ese tratamiento y también debe estar informado de los riesgos que corren, pero que éstos, provengan de un dictamen seguro, porque en el documento que les hacen firmar, señala que incluso puede provocar causas graves, como infarto, ¿en qué se basan para informar ese riesgo? como derecho humano a la salud en su nivel más alto, es importante que se explique con base en datos fidedignos y de esa forma explicárselo al paciente, a fin de que este pueda decidir si se vacuna o no.
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