OPINION

SIN DERECHOS LABORALES – AL DESNUDO

Edgar Rodríguez.

Los trabajadores de confianza, supernumerarios y de contrato al servicio de la admiración estatal, carecen de las garantías labórales mínimas como lo son seguridad en el empleo, trato digno y remuneraciones justas. Como cada fin de sexenio, terminan pagando los platos rotos por el gobernador saliente, pero nunca como ahora se había llegado al grado de correrlos a todos para dejarle limpio de polvo y paja a la gobernadora entrante, las dependencias que estarán a su cargo a partir del 1 de noviembre de 2021.

Los únicos que continuaran cobrando las próximas cuatro quincenas sus los titulares de las mismas y sus responsables administrativos, para entregárselas a sus relevos morenistas. Sin sus brazos que son los empleados de confianza, los jefes sólo se arrellanarán en sus cómodos sillones a esperar que los días corran y llegue la fecha fatídica para que ahuequen sus alas con todo y chivas.

Se sabe que la limpia total de los cargos de confianza del aparato burocrático estatal fue la condición sine qua non  que le impusieron al gobernador José Ignacio Peralta para adelantarle participaciones federales destinadas al pago de los salarios y prestaciones que lleva ya dos quincenas sin cubrirle a sus trabajadores. Sin embargo, ya pasaron quince días desde que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, le lanzó el salvavidas al mega devaluado mandatario estatal, y es hora de que todavía no lo sacan del agua; al contrario, lo hunden más obligándolo a ensañarse como lo está haciendo, con sus trabajadores de confianza.

Si de por sí el funcionamiento deficiente del aparato administrativo estatal, so pretexto de la pandemia, ya les había causado pérdidas millonarias a los ciudadanos por la dilación de sus trámites de todo tipo, ahora con el cese de los empleados de confianzas las cosas empeorarán, cruda realidad que no les quita el sueño ni al gobernador que sale ni a la gobernadora que entra. Ambos ven a los colimenses como Dios a los conejos.

Los empleados de confianza maltratados por su patrón pueden recurrir a tribunales del trabajo en busca de justicia laboral, y los ciudadanos a los civiles, mercantiles y penales, para exigir que los indemnicen por las pérdidas imputables a la ineficiencia e irresponsabilidad de un gobierno.

Los defensores del mandatario actual aseguran que el largo brazo de la justicia no lo alcanzará porque respaldó con todos los recursos a su alcance, incluidos los económicos, la candidatura de la ahora gobernadora electa, pero hay quienes aseguran que dada la quiebra total a la que llevó al gobierno del estado, no se la perdonarán. El presidente López Obrador ya ordenó no taparlo ni encubrirlo. Hay que esperar para ver a quién le dan la razón el tiempo y los fiscales de la 4T. Como ya nada es como antes, quién sabe cómo les vaya los que ya se van. De entrada, ya se ganó la condena casi toral del pueblo bueno y no tan sabio de Colima.

Con adeudos de sus salarios y prestaciones, los empleados de confianza del gobierno peraltista se irán a la calle a parir del próximo 1 de septiembre de 2021 a engrosar las filas de los desempleados en tiempos del Covid-19. El responsable de su desgracia tiene nombre y apellidos, incluido el materno que ya recuperó tras habérselo retirado su tío: José Ignacio Peralta Sánchez. 

Se dice que…

*El Secretario General del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado, Martin Flores Castañeda, Amenazó hace días con que presentaría “una serie de denuncias penales ante la Fiscalía General del Estado y el Órgano Superior de Auditoria y Fiscalización Gubernamental del Estado, por presuntos actos de corrupción y desvíos de recursos en el gobierno de Ignacio Peralta”, pero, por lo visto, no ha pasado de sus tronantes declaraciones a los hechos.

*La Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Colima, la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias del Estado de Colima (AMMEEC) y la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) se han pronunciado ya por la cancelación definitiva de la Edición 2021 de la Feria de Todos los Santos

*“Nos preocupa mucho qué es lo que va a pasar después de que se vaya la Feria, por lo que ahora sí ya es momento de unirnos y darle la cancelación a la Feria. Porque vamos a acabar en un descontrol no sólo de salud, no queremos llegar a una Navidad triste no sólo por el tema económico, sino que también nos falten familiares o amigos”, expresó Felipe Santana Linares, dirigente del gremio restaurantero que es de los más perjudicados por la pandemia del Covid-19.