EL T-MEC Y SUS PERSPECTIVAS PARA MÉXICO

A partir el 1 de Julio, arrancó la nueva era en las relaciones de México y Norteamérica, esto a 25 años de que se firmara el Tratado de Libre Comercio, mismo que  ahora es sucedido por el nuevo instrumento jurídico denominado el T-MEC que involucra a México, Estados Unidos y Canadá.

A decir de Jesús Seade, Subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, el T-MEC trae tres resultados que son fundamentales por su impacto positivo para México. 

Señaló que el negociar y definir las Reglas de Origen en una serie de productos que son denominados como los más importantes en el comercio, tal y como son los autos, productos químicos, electrónicos, etc. convierte a México en la opción  más atractiva por su importancia comercial y económica.

Refirió que otro de los resultados es el apuntalamiento que vienen a darle a la reforma laboral, “no es imposición es lo que necesitamos y por su importancia estructural para la modernización de México este es el resultados más importante”, subrayó.

El tercero, y que consideró el más importante de todos, es que se crea un sistema sólido muy claro de Solución de Diferencias que es normal en todo tratado comercial.

“En la bilateral hemos tenido problemas con aguacate, tomate, transporte terrestre y de carga, azúcar, acero y aluminio, los cuales se han resuelto yendo a pedir favores a Washington, ahora vamos a tener una forma equitativa basada en derecho y vinculante para que se resuelva cuan debe ser”, explicó.

Por su parte, Luis de la Calle, Socio Fundador de De la Calle, Madrazo, Mancera, comentó que en el contexto mundial que se vive actualmente era muy necesario que los presidentes Donald Trump y Andrés Manuel se comprometieran en un proceso integrador de América del Norte y con la firma del T-MEC se está reafirmando este proceso. 

Señaló que con este nuevo compromiso se vislumbra el éxito de atracción-inversión hacia México, por lo que consideró fundamental el mandar las señales de que nos interesa la inversión y que así nuestro país se convierta en la plataforma de exportación de América del Norte para el mundo.

Puntualizó que no se trata de verlo solo como la integración,  sino en posicionar la competitividad en América del Norte, asegurando que existen los elementos para hacerlo hoy en día por la diversificación del riesgo en todo el mundo, por la abundancia energética en América del Norte, el enorme talento del trabajador mexicano y las ventajas logísticas que tenemos.

“La competitividad del atractivo es un proceso dinámico, no se puede decir que ya se tienen el T-MEC y sola va a llegar la inversión, por la inversión se compite y México es un país altamente atractivo para recibir inversiones”, sostuvo.

Destacó que México tiene muchas ventajas, pero esas ventajas hay que potenciarlas con el posicionamiento del sector público y también del privado, generando que haya una reinvención a sí mismo para realmente ser competitivo en Estados Unidos y con el mundo.

“Esto no es un cambio que se dio con el encendido de la luz donde al llegar el tratado llega la inversión, tenemos que trabajarlo, el tratado es una vía optima, amplia para comerciar mejor e integrarnos más, pero lo que vaya en ese camino dependerá de lo que se haga en casa”, refirió.

“Hay que ayudar, apoyar, corregir con el empresario, ver donde están los cuellos de botella, hay que conciliar, hay que trabajar para tener mejores resultados y crecimiento en economía doméstica. No solo es negociar es obtener resultados por lo negociado”, acentó.

Respecto al mecanismo de Resolución de Controversias, Eugenio Salinas, Presidente de la Comisión de Comercio Exterior de Concamin, manifestó que el T-MEC busca que haya una mejora en la situación laboral para los mexicanos. 

Aseguró que en lo que respecta al sector empresarial, ya están ocupados en el cumplimiento de los compromisos laborales internacionales. 

Comentó que en ese sentido y para evitar que haya un mal uso de estas reformas, se logró un párrafo donde especifica que si Estados Unidos o Canadá lo usan de manera frívola o con demandas no fundamentadas se suspende.

“No nos debemos de preocupar en el sentido de que si estamos preparados, hay más que eso en todo el mecanismo de solución de controversias de solución rápida, lo que hemos estado haciendo es avanzar con un sin número de foros en diferentes cámaras para que vayan conociendo los potenciales señalados, de lo que deben tener en la relación con su sindicato o empleados y sobre todo tener presente las sanciones que eventualmente podría poner Estados Unidos en nuestros productos”, expuso.

Comentó que también están analizando que el mecanismo debe operar para las dos vías, y en algún momento dado pueda ser usado para defender intereses de connacionales en Estados Unidos.

“Estamos ocupados ya en que se conozcan los detalles del mecanismo y buscando la forma de que las empresas estén preparadas, así como lo están para una auditoría de comercio exterior, de medio ambiente y sobre todo de que difundamos cómo los departamentos de Recursos Humanos puedan mantener una relación laboral con empleados y obreros”, apuntó.

En ese sentido, Luis de la Calle, abundó que para que realmente se aproveche el Sistema de Solución de Controversias, “depende fundamentalmente de nuestro país, de que sepamos utilizarlo de manera adecuada, sepamos defendernos de manera adecuada, con profesionalismo, para evitar perder casos al hilo que provoquen una avalancha de casos en contra de México”. 

Al respecto, Jesús Seade expuso que el sistema tripartito que se venía dando desde hace varias décadas gobierno-patrones-trabajadores generó una gran represión salarial que no solo ha sido injusta, ha distorsionado y privado de ingresos más altos a una gran parte de la población, lo que ha representado una falta de poder adquisitivo y por lo tanto menos crecimiento. 

“Este es un problema muy serio que se ha venido cargando y que este tratado ayuda a superar y apuntalar creando una nueva línea de necesidad de modernizarnos y hacer las cosas bien”, explicó.