ESPECTACULARES TRAJES TÍPICOS PRESENTARON LAS CANDIDATAS EN EL CERTAMEN PARA ELEGIR EMBAJADORA DE LA FERIA DE LOS TODOS LOS SANTOS

Este miércoles se llevó a cabo en el Teatro Universitario la elección de la Embajadora de la Feria de Todos los Santos Colima 2022, donde las representantes de cada municipio presentaron espectaculares trajes típicos, resaltando la creatividad, diseño y arte, originalidad y porte.

La primera en presentar su traje fue Yamila Palacios Rendón, de Villa de Álvarez, quien exhibió su vestido “Luces de una mujer villavarense” y en su explicación dijo que “no era china, ni era poblana, era una mujer que llegó a nuestro país encadenada, destinada a la miseria y a la esclavitud, fue comprada por una familia que le concedió su libertad. Los trajes brillosos y las lentejuelas pronto harían protagonismo, convertirían a la mujer a través de su vestimenta en la imagen simbólica del empoderamiento de aquella historia.

En La Petatera se guarda voces, los recintos y los establos suenan con emoción, es parte de una identidad que trasciende. De la historia nacional la Villa toma su fuerza, su esencia, las luces que por un momento reflejaban el interior, hoy renacen desde adentro, la hacen brillar, saberse valiosa, inteligente, fuerte y capaz que es lo que la sustento a su andar”.

María Fernanda Sánchez Nares, del municipio de Colima, presentó el vestido “Princesa Zoyatl o Princesa Palmar”, el traje típico fue estilizado inspirado en nuestras verdaderas raíces. En las espalderas las palmas, que nos dan identidad del ayer, hoy y siempre. En el cuerpo el icónico vestuario de perro de fuego, abulimiento del volcán de fuego y nieve. En el brazo derecho nuestras artesanías y en el brazo izquierdo nuestra tuba.

Paulina Monserrat Aguilar Godínez, de Cuauhtémoc, presentó el vestido “Guardia de Cuauhtémoc”, obra de arte confeccionado en su volada con cristales, canutillo, perlas y oro, su peso de 15 kilos, con más de 8 mil incrustaciones entretejidas, que representa del municipio las cosechas y tradiciones. Al ser un municipio azteca hijo de Cuauhtémoc último guerrero, el traje iluminado que simboliza el Sol que nos elige y acompaña, símbolo de un nuevo comienzo de un nuevo comienzo de sabiduría y de abundancia.

Claudia Carolina Barajas Pinto, de Comala, portó un vestido de nombre “Glorioso San Miguel”, el traje decorado con cenefas de Vilvestre vegetación y de palomas que adornan los jardines y campos comaltecos. Sobre las sienes un aura que cubre la luz de la esperanza y en sus manos la balanza de la justicia divina y una espada de combate con la que siempre desde lo más alto de su parroquia está en guardia nuestro protector glorioso San Miguel.

María Alejandra Cisneros Barajas, de Coquimatlán, presentó el vestido “Riquezas de mi pueblo”, un traje típico que representa uno de los elementos más emblemáticos del municipio el maíz, en una manó portaba una atarraya que significa la pesca del chigüilín y en la otra mano un báculo que representa la fuerza y el poder que al estocarlo hace un llamado a los dioses para el buen cultivo y las cosechas, en su espalda el Sol que fertiliza los cultivos del municipio.

Valeria Silva Benicio, de Ixtlahuacán, exhibió la indumentaria “Xayacatl”, traje que representa las costumbres y tradiciones de su pueblo, las más antiguas y emblemáticas, donde la gente muestra su fe y devoción la celebración de los Chayacates, tradición que ha surgido a través de la historia de nuestro mágico Colima.

Dalila Guadalupe Virgen Aguilar, de Minatitlán, presentó el vestido “Mujer minatitlense”, un traje típico como símbolo de la mujer que trabaja día a día para sacar adelante a su familia. El pantalón es la expresión de cómo el café florece, su maduración hasta su cosecha; el busier contiene café que es cultivo en tierras minatitlenses.

Marcela Corona Verduzco, de Tecomán, portó un traje de nombre “Madre de los mares y luz de los océanos”, en alusión a la Virgen de la Candelaria que salvó al pueblo tecomense de un maremoto en junio de 1932.