MUNICIPIOS

FEDERACIÓN DE SINDICATOS RECHAZA INCREMENTO DEL 3%; PODRÍAN REALIZAR ACCIONES DE RESISTENCIA CIVIL, ADVIERTE AUDELINO FLORES

No descarta la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Gobierno, Ayuntamientos y Organismos Descentralizados del Estado de Colima (FESTEM), acciones de resistencia civil para ser escuchados y atendidos en la demanda del incremento salarial del 10% para los trabajadores, aseguró Audelino Flores Jurado, dirigente de esa organización.

Señaló que son ellos los que están castigados con un incremento criminal del 3 por ciento, pero la prioridad siempre será el diálogo, aunque no descartan otro tipo de acciones para lograr ser escuchados. “Estamos dispuestos los trabajadores a la resistencia civil o lo que sea necesario, siempre por las vías legales, para lograr que se nos escuche, porque no es posible que se quiera perjudicar a tantos trabajadores con un salario que no ajusta”.

Dijo que no están de acuerdo con un incremento “que lo consideramos criminal para los trabajadores porque los artículos de primera necesidad han subido considerablemente y menos aun cuando solo se determinó que sea al puro sueldo, no al salario completo”.

Indicó que los trabajadores no fueron incluidos en el acuerdo de incremento que firmaron los 10 presidentes municipales, pero este jueves serán recibidos por la gobernadora para tener un diálogo y buscar la forma de rectificar.

Argumentó que los artículos de primera necesidad se han incrementado más del 7.5%, porque hay algunos que incluso han superado el 20 ó 30 por ciento y esa es una realidad que nadie puede esconder si se comparan los precios de hace un año y hoy.

Comentó que la Federación de Sindicatos está integrada por 10 sindicatos en todo el estado con 3 mil 500 trabajadores y la decisión de pagar el 3% de incremento salarial es ilegal, pues los convenios no son unilaterales.

“Solo lo firmó la parte patronal, pero no incluyeron a la representación de los trabajadores. ¿qué tal si nos reunimos los sindicatos y le ponemos más prestaciones a un convenio, ¿vale?, verdad que no; entonces, tampoco ellos pueden hacerlo.

“Es fácil salir y decir que no tenemos hartazón, yo oí al secretario de Administración del Gobierno del Estado que quería hacer una consulta para ver si el pueblo estaba de acuerdo en pagarle a los trabajadores.

“Sí, que se haga una consulta, pero para saber si están de acuerdo en pagar a los funcionarios, a los diputados y a los regidores, las cantidades que les pagan. A ver si el pueblo está de acuerdo en que se les paguen 80 ó 90 mil pesos”, concluyó.

Por otro lado, señaló que lleva buena amistad con el alcalde de Tecomán, Elías Lozano, pero no le permitirá que haga lo que quiera.

“Los derechos de los trabajadores son irrenunciables, así lo dice la ley y se están violando los Derechos Humanos de los trabajadores, entonces, yo no puedo permitir que por la amistad que tenemos, se den situaciones como esta”.

Aseguró que se ha visto el deseo de perjudicar nada más a la clase trabajadora, porque en Tecomán se ha dado un incremento de 6 por ciento en muchos años.

Agregó que “otros sueldos se han incrementado en un 80 y 100 por ciento, como de los regidores y funcionarios de primer nivel. Mi hijo era secretario del ayuntamiento y ganaba 15 ó 20 mil y ahora el secretario gana 50”.

Manifestó que los empleados han recibido un punto porcentual por año, mientras, por ejemplo, un regidor del ayuntamiento ganaba 35 mil y ahora gana 75 mil u 80 mil.

Señaló que además a los trabajadores de Tecomán aún se les deben 200 millones de pesos “que se robó el anterior presidente municipal” y aunque ya presentaron más de 10 mil hojas de pruebas ante la Fiscalía, no han procedido.

Explicó que hay un laudo que se ganó en la Corte, por 50 millones de pesos, que el ayuntamiento argumenta que no tiene dinero. “Y eso es porque se lo llevó otra persona y a esa otra persona no se lo quitan. O sea, siempre los trabajadores son los que tienen que pagar ¿por qué?”, preguntó.

“Está claro quién se los llevó. Si el gobierno no quiere actuar contra ellos, pues que lo asuma, pero por qué tienen que ser los trabajadores los que se sacrifiquen por las sinvergüenzadas de otros”.